Me preocupo demasiado mirando
hacia el futuro planificando cosas que sé que probablemente no se llevaran a
cabo, mirar por todos, por él por ellos por mí. Es cierto que el futuro se
encuentra delante de nuestros ojos vivimos prácticamente en un futuro pero
resulta ser una estupidez planificar y te das cuenta cuando ves tus planes
desmoronados por una estúpida palabra que lo puede cambiar todo. Sería un poco
alocado el vivir ignorando el futuro haciendo aquello que deseo en mi día a día
sin importarme apenas aquello que pudiera suceder. No quiero vivir condicionada
por un futuro que ni es seguro que llegue pero sea como sea es mi única opción.
Las cosas que deseas que no lleguen suelen llegar demasiado pronto puedes
haberlas planificado o no pero lo cierto será que nunca nada saldrá como lo
habías pensado es inevitable y entonces ¿qué sentido tiene?
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